En febrero de 2019 África Bayón Bulgarcita Pingos y yo tuvimos la suerte de exponer en La Fontanería Crea, un espacio de creatividad y educación que si no conoces te recomiendo mucho visitar.

Para ello preparamos un trabajo a partir de una propuesta de cadáver exquisito, esa técnica tan loca del surrealismo y que tanto juego da cuando se practica. En esta ocasión nos atrevimos a explorarlo desde lo textil, con el hilo conductor «Nos están asesinando». Queríamos expresar nuestra mirada sobre la violencia a las mujeres, nuestra rabia, nuestras preguntas… generar un diálogo entre nuestras diferentes maneras de expresarnos, sin saber si encajarían en un relato completo.

Y funcionó.

El resultado fue un conjunto de 13 piezas que unidas entre sí recorrían la mirada, la rabia, las preguntas… Un relato visual, acompañado de 13 textos, hilvanado a cuatro manos y entretejido con diferentes materiales y técnicas artísticas, a través del cual indagamos y denunciamos, provocamos e interpelamos, recorremos nuestra propia biografía y evocamos un tiempo en donde esta denuncia no sea necesaria.

Al cabo de unos meses lo transformamos en un libro para presentarnos a la convocatoria que desde el grupo de investigación sobre libro arte textil de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid, LAMP, abrieron a propósito de la VIII Bienal Internacional de Arte Textil, celebrada en Madrid entre septiembre y noviembre de este año.

Y nos seleccionaron. Participamos en una exposición colectiva junto a otras 18 obras en la Biblioteca de la Facultad de Bellas Artes, en Madrid, y por lo que nos cuentan gustó mucho. Gustó, pero sobre todo tuvieron claro desde el principio que querían que nuestra obra estuviese presente en dicha exposición. Imagino que más allá de las razones estéticas, hubo una convicción de que la denuncia, la reflexión, el grito!! son cada vez más necesarios e imprescindibles.

Ahora, pasado este periodo expositivo, el libro vuelve a nuestras manos, y tenemos el deseo de poder compartirlo en lugares donde podamos abrir un diálogo, más allá del tejido y de los hilos, donde las palabras puedan intercambiarse en vivo, en vida. Pero ese es otro paso que vamos a ir dando, y pronto os lo contamos.